El Ayuntamiento de Mutxamel ha elevado una queja formal a la Conselleria de Transports por la eliminación de frecuencias de la Línea 23 que une Mutxamel con el Hospital de Sant Joan y Alicante.
El concejal de Transportes, Rafael Pastor, señala que en estos momentos de estado de alarma, se debe asegurar y cumplir las directrices y recomendaciones sanitarias, entre las que prevalece el distanciamiento social para evitar mayores contagios entre la población.
Con estas reducciones, se observa un aumento de usuarios tanto en los autobuses como en las paradas, lo que está produciendo un grave perjuicio al servicio y a los propios ciudadanos, que en su mayoría son personal sanitario y trabajadores esenciales que deben desplazarse a través de este medio de transporte, y hace difícil el cumplimento de las recomendaciones sanitarias propuestas.
Como consecuencia de las reducciones de frecuencias impuestas se está produciendo un ERTE a la plantilla, alrededor del 50%, que afecta a trabajadores y personal de organización. Dicha situación no debería permitirse: que una concesión pública de la Generalitat, como es el transporte público, utilice en estos momentos despidos temporales.
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