El circuito musical alicantino… y la esperanza.

Si el martes pasado rompíamos una lanza por los grupos alicantinos, este fin de semana ha cristalizado la idea, disipada en una dosis de realidad hecha canción de orquesta filarmónica, presentación de disco-libro, jam session o BSO, a secas, de un fin de semana menos intenso que el anterior, que nos ha servido para regocijarnos de nuestra alicantinidad.

A ver si ese término acuñado por La Chiado, y que tanto nos gusta, llamado Vicentismo, se convierte en una corriente alternativa que cambie el criticar por criticar por el punto justo de Chovinismo.

Porque aunque no vamos a negar que nos gusta poder ver a los mejores grupos del mundo tocando en nuestra provincia, no es menos cierto, que el circuito local, también, debe tener su protagonismo. Por eso, nos pone cachond@s ver, que a los eventos de Mailers, Desmond, Smoking Soul,  o al jámtrico del tumbao vaya alguien más que los cuatro amig@s de los artistas. 

Es más, empezamos a ver cierto cambio en la forma de respetar al músico. Debe ser que importa que Gimnástica sea el grupo seleccionado para tocar en el Granada Sound, que Rosy Finch triunfe en el Villa de Bilbao o en Suecia, que AnotherYou, Vera Green o Smoking Souls toquen en los grandes festivales, que todo el mundo underground, incluído el Sótano de Radio 3, hable del último disco de Futuro Terror, o el de Macumba Brothers…

Sea por lo que sea, nos gusta que se comprenda el porqué de los 5€ de la entrada, lo que cuesta grabar y editar un disco (te guste más o menos) y hasta se valora que un músico saque a relucir toda su vena artística, sea rodead@ de una banda o, sól@ ante el peligro.

Nos encanta que la Fnac se quede pequeña para ver la presentación de «de Pandora y mis canciones en Vela«, que l@s niñ@s se agolpen en las primeras filas y empiecen a entender la importancia que la música debe tener en sus vidas.

Nos congratula que Alicante y Elche se pongan de Acuerdo, aunque sólo sea para mezclar a sus bandas municipales en dos conciertos.

Nos gusta que los chicos de Mailers puedan cumplir sus sueños y contribuyan al reconocimiento de esos músicos de conservatorio que han forjado su carrera sin, quizá, todo el reconocimiento que merecen. Vetusta lo hizo en Lorca, Second en Murcia, Metallica con la sinfónica de Londres, y Anabel y compañía consiguieron emocionar a un paraninfo de la UA, a reventar, con una versión sinfónica de Materia, Un segundo, víboras… 

Y, además, hay hueco para las buenas causas y mientras Mailers donaba su arte a AEPA, los cantautores hacían lo propio con los trabajadores en huelga de AFEMA, en una de esas noches en las que el talento alicantino mezcla voces, técnicas de tocar la guitarra, risas y sonidos de trompeta.

Ojalá este circuito autóctono improvisado sea algo más que una fecha perdida en un calendario. Los medios están ahí. Los permisos, parece que están al llegar, y parece que hasta hay un público interesado en que todo esto funcione. Sólo queda que la esperanza, se haga realidad. Y quizá, muy pronto, os pase como a mí y en vuestro coche, los discos de Vetusta, Bowie, Led Zeppelin, Nirvana, The Doors, The Velvet Underground o Black Sabbath, se mezclen con los de Xeco Rojo, Ivanitas, Baralides, Fingertips… o alguno de los grupos de esta lista made in Alicante