Si os gustan los musicales, quizá os suene más Ángela Lansbury interpretando a una locuela cantarina alejada de su papel en la serie se ha escrito un crimen o, quizá prefiráis la literatura de Christopher Bond. Eso es lo de menos. El caso es rastrear la cultura como han hecho una serie de chavales, alumnos y exalumnos de los Jesuitas, para adaptar a los tiempos modernos este clásico inmortal.
La ilusión compensa la escasez de medios y como bien argumentaban en el debate de Be Xl de la pasada semana, la profesionalidad en este extraño mundo del arte, más que en dinero debería medirse en talento. Y eso, a pesar de su juventud, es algo que les sobra a Juan Carlos Verdú (director de la obra), Pau Vaillo (Adaptador del texto), los dos protagonistas: José Jesús Maraver y María Rovira, al resto de miembros, que son muchos, de esta aventura extraescolar llamada La nave Argo y a ese profesor de gafas que invierte mucho tiempo en comprender las inquietudes de sus alumnos y en que todo salga como tiene que salir.
Del argumento, preferimos no hablar, para ver si, con un poco de suerte, esto que no fue más que un estreno, viaja por el mundo copando carteleras de teatros de otras ciudades. Que obras clásicas como Ifigenia o Bacantes, o modernas como Un dios salvaje compartan espacio y aprovechen la vacante que, por ejemplo, ha dejado Arturo Fernández en el teatro Principal…
Nos consta el trabajo que todo esto cuesta y, de primera mano, comprobamos, en el descanso de la obra, toda la ingeniería cultural que se mueve alrededor de proyectos mundanos como este: sean concertados y haya o no, por medio, dinero público.
Proyectar las ilusiones de los dubitativos postadolescentes es necesario. Porque las sinergias, de las que tanto hablamos, son la base del futuro y, por suerte, cada semana hay escenarios pequeños, teatros de colegio o centros culturales medio vacíos que forjan el talento de los futuros abogados, diseñadores, empresarios,actores o políticos, y nos congratula comprobar que: podemos estar tranquilos confiando el porvenir a esta generación.
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