Sobre la segunda pista en el Aeropuerto…

Por minoría absoluta

La decisión de construir la segunda pista del aeropuerto de Alicante,  o de posponer su construcción depende de varios factores y análisis detallados que deben llevar a cabo tanto la Generalitat como el Gobierno central. Algunos datos que podrían respaldar la necesidad de construir la segunda pista incluyen:

1. Aumento del tráfico aéreo: Si hay un crecimiento significativo en el tráfico de pasajeros y carga en el aeropuerto, podría justificar la necesidad de una segunda pista para gestionar adecuadamente el aumento de vuelos.
2. Mejora de la eficiencia operativa: Una segunda pista podría mejorar la eficiencia y capacidad del aeropuerto, reduciendo los tiempos de espera y aumentando el número de operaciones que se pueden realizar.
3. Planificación a largo plazo: Si se prevé un aumento constante en la demanda de vuelos en el futuro, la construcción de la segunda pista podría ser vista como una medida preventiva para evitar problemas de congestión en el futuro.

Sin embargo, también existen argumentos para posponer la construcción de la segunda pista:

1. Costo y financiamiento: La construcción de una segunda pista puede ser costosa y requiere una inversión significativa de recursos. Si no hay fondos suficientes disponibles o si hay otras prioridades más urgentes, podría ser razonable posponer el proyecto.
2. Impacto ambiental y comunitario: La construcción de una segunda pista puede tener impactos ambientales y sociales significativos, como el aumento del ruido y la pérdida de terrenos. Si estos impactos no se pueden mitigar adecuadamente o si hay una fuerte oposición por parte de la comunidad local, podría justificar posponer el proyecto.
3. Cambios en la demanda: La demanda de vuelos puede fluctuar debido a factores económicos, políticos o tecnológicos. Si no se espera un aumento significativo en el tráfico aéreo en el corto o medio plazo, podría ser prudente posponer la construcción de la segunda pista hasta que sea realmente necesaria.

En última instancia, la decisión de construir o posponer la segunda pista del aeropuerto debe basarse en un análisis exhaustivo de todos estos factores, así como en consultas con las partes interesadas y la evaluación de los impactos a largo plazo. La Generalitat y el Gobierno central deben considerar cuidadosamente todas las opciones antes de tomar una decisión final.

Pero la realidad es que el año pasado, nuestra terminal recibió un récord histórico de 15.7 millones de pasajeros, superando la marca establecida en 2019. Esto representa un crecimiento del 4.6% en comparación con el año anterior. Aunque resulte curioso, las estadísticas muestran que se llevaron a cabo algo más de 100,000 operaciones aeroportuarias, lo que implica un ligero descenso del 0.9% respecto al año 2019.

En cuanto a las instalaciones, cuando se inauguró la nueva terminal en 2011, bajo la gestión del entonces ministro socialista José Blanco, se aseguró que podría atender hasta 20 millones de pasajeros y que el edificio antiguo podría someterse a sucesivas ampliaciones.

La pregunta que nos queda por responder es la siguiente: ¿cuál es la capacidad máxima de operaciones (salidas y llegadas de aviones) que nuestro aeropuerto puede soportar con una sola pista y cómo podría traducirse ese dato en número de pasajeros?