Enfermedades mentales hay muchas. La mayoría están ahí apunto de ser descubiertas: Una obsesión, el aburrimiento corregible, los agobios innecesarios, los números rojos, los ojetes rojos, la negra rutina, los triglicéridos bajos, el influjo del sofá o la madre que parió a la seriedad con la que la gente se toma las cosas.
- Hay que reírse más,
- Hay que salir más,
- Hay que arriesgarse más,
- Hay que probar hummus de remolacha,
- Hay que conocer los secretos del October Press (en general)
- Hay que ser respetuoso con los anfitriones que organizan fiestas originales
- Hay que arreglar las puertas que chirrían y rompen el silencio sepulcral del diván.
- Hay que escuchar… silencio, empieza la obra (o la vida).
A la salida tienen tarjetas… pero, mientras salís de esta normalidad con forma de jaula, vamos a asilvestrarnos con una micro obra, con un nombre sugerente: «Obsesiones», algo así como una terapia de personalidad múltiple, con un alma, una doctora, un biombo detrás de un perchero, un maletín, carmín rojo y un peluquero de pelos en la lengua, barriendo los rastros de la decadencia contagiosa.
Habla Soledad Gijón, con voz de Fortunata (sin Jacinta). Un toque materialista, mezclado con el sexo de una niña perturbada que dejó la pulcritud aparcada en un colegio de monjas y la hipocondria desdramatizada.
¡Qué diga lo que quiera!
Yo me reí y ¿sabéis lo bien que sienta? ¿no?
Y pensé, bueno, más bien reflexioné, sobre lo que esta desconocida de treinta y tantos nos decía. Porque aunque os hayan engañado con la idea de que desconectar es dejar la mente en blanco delante de una caja tonta… NOOOOOOO, lo que veis ahí no es ni humor, ni entretenimiento, ni hostias. ¿Sabéis entreteneros? ¿no?
Ya tenemos otra enfermedad (sin spoiler): los cuatro gatos. No, eso no es una enfermedad, es un virus en vías de extinción surgido de los insustancial del apellido alicantino. La enfermedad es que habiendo propuestas como La Sala Itinerante, la gente sea tan estática, inmóvil, invariable…
No hay tarjetas a la salida, pero habrá más microfunciones para acostaros como nosotras el jueves: curadas.
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