A eso de las diez y cuarto, nuestra niñez se subió al escenario vestida de negro. Nuestra madre y la del resto de los asistentes no podían faltar a esta cita con nuestros tiempos de puericia, y esa canço del bressol, que tan bien describe lo que los parcos en palabras nunca supimos decirle a nuestras progenitoras de otra manera, abrió una noche mágica en una plaza sin toros.
Ya lo dice la canción: Para la libertad, sangro, lucho, pervivo (y bebo cerveza), porque no está la cosa para que después de tanta batalla, días de hospital y noches en cautividad, nos acabe matando una simple lipotimia. Así que paliada la posibilidad de morir deshidratados, nos dimos cuenta de que poco importan los años que tuvieramos hace veinte años, si, como entonces, mantenemos intactas las ganas de reirnos de la vida, con el mismo arte con el que lo hizo el maestro desde su silla, con un cubata en una mano y la vitalidad empuñada en sus ganas de cantar que hace 35años tenía treinta y tantos y que, ya que ha llegado tan lejos, y se ha forrado con los cálculos de lo que rentan las matemáticas tergiversadas de los gustos y los juicios parciales, porque rendirse ahora ¿no?A falta de ella em deixa (que no sabemos porqué no aparece en el Spoty) este es el repertorio que nos regaló el maestro el pasado miércoles 29 de julio en la Plaza de toros de Alicante.










Para ser usted parco en palabras, no escribe usted nada mal
Hablando, escribiendo, a veces, no tanto.
Compartimos niñez y tengo que decirte que me has emocionado, porque por Serrat me llamo Lucía, me gusta la poesía y tantas cosas que has sabido describir a la perfección.
Muchas gracias Alicante live music
Muchas gracias Lucía 😉