Tras el fracaso estrepitoso de la 51ª Edición, organizada por una empresa malagueña que no se enteró de nada, La Junta de Gobierno Local ha dado el visto bueno, hoy, a la convocatoria de un nuevo concurso abierto al que pueden optar empresas interesadas en organizar la Feria del Libro de Alicante 2022.
El presupuesto base de licitación de 34.485 euros, IVA incluido. Y como novedad, la entidad que organice este encuentro cultural deberá contar en la programación con un 40% de escritores naturales o domiciliados en Alicante y provincia.
La intención puede ser buena, pero, a veces, la política data de mediar, de tender puentes, de facilitar las cosas y de dar alas a la gente de la ciudad. Si fuera por una cuestión de transparencia sería cojonudo, pero en Alicante hay muchos agentes literarios que difícilmente van a ganar un concurso frente a buitres que presentan proyectos que luego no cumplen y que generan discordias innecesarias en uno de los ámbitos culturales más laureados de la ciudad.
Podríamos personificar el éxito en librerías transversales como Pynchon, 80 Mundos ó Fahrenheit, la Agencia Mankel, o las programaciones que presentan la SEU, La Casa del Mediterráneo, el IAC Juan Gilalbert, o la propia Concejalía de Cultura en las, cada vez más descuidadas Bibliotecas Públicas. Ser capaz de unirlos a todos bajo un mismo techo durante una o dos semanas sería un gran éxito.
Por el contrario, parece ridículo abrir un concurso en lugar de sentarse a hablar con las librerías (que el año pasado no participaron en señal de protesta), con los escritores (la mayoría de los referentes tampoco acudieron el año pasado a La Feria) y los agentes antes citados.
Está bien querer garantizar la presencia de escritores naturales de la provincia, que la Plaza Séneca sea la sede de la Feria y que se parta de un presupuesto de más de 30.000€. Pero es hora de enterrar el hacha de guerra y pensar en que la dinamización y la gestión es más apetecible forjada desde dentro y con un mínimo de consenso, que dejando en manos de «extraños» la labor que llevamos más de 10 años sin saber hacer aquí. La Concejalía de Cultura debe estar para poner paz, o en su defecto, buscar los puntos en común que todos deberían tener para crear una feria del libro acorde con lo que Alicante necesita.
No hace demasiado tiempo parecía posible…
El pliego y las cláusulas
El Ayuntamiento convocará el concurso que tiene por objeto “la programación, gestión, ejecución, coordinación y dinamización de la Feria del Libro de 2022, a través de presentaciones de libros, conferencias, actuaciones, actividades infantiles, visitas escolares y demás análogos”, según el pliego de cláusulas.
La Feria se organizará -según las bases- para ser presencial, con actividades también on line. Si la situación sanitaria se agravara, el contratista debería canalizar todas las actividades íntegramente on line, se apunta en dicho escrito.
El pliego de condicionantes técnicas de la convocatoria especifica que el contratista que gane el procedimiento abierto “deberá presentar, al menos con un mes de antelación” a la feria, el programa completo de los actos que se desarrollarán durante el evento, aprobado por la concejalía de Cultura.
Actividades obligadas
El programa contará con al menos diez presentaciones de libros de autores o autoras de reconocido prestigio, no presentados en las dos ediciones de la Feria anteriores. Y del total de autores o autoras, un 30% deberán haber nacido o ser residentes en el municipio de Alicante; un 10% deberán haber nacido o ser residentes en la provincia de Alicante; y un 60% será del resto de España, de reconocido prestigio y conocido por el gran público; todos deberán tener libros editados o autoeditados, según recogen las condiciones específicas del concurso.
El programa deberá incluir, asimismo, un mínimo de dos conferencias o diálogos de escritores de reconocido prestigio o personas de renombre vinculadas al mundo del libro y la literatura; un mínimo de dos actividades infantiles diarias (cuentacuentos, talleres…) que incentiven el interés por la lectura y la cultura en general, y visitas escolares todos los días lectivos que dure la feria, según apunta el documento.
Temática, a la elección de Cultura
La concejalía de Cultura elegirá la temática de la feria, en base a las propuestas que se le presenten. El departamento dirigido por Manresa también tendrá la última palabra en cuanto a la elección del cartel, creatividad, diseño gráfico e imagen del encuentro.
La empresa organizadora deberá coordinarse con librerías e instituciones participantes para acoger en el programa general las actividades que éstas propongan.
Lo primero que hay que hacer, hablar con propiedad, no es la 52 FERIA es la 3 FERIA DEL LIBRO MUNICIPAL DE ALICANTE.
La Asociación provincial de empresarios Libreros y papeleros de Alicante la ORGANIZO desde su creación, 48 años íntegramente, con una APORTACION del Ayuntamiento de Alicante de «1000€»..
10 días en SENECA es un calvario, no hay público lo primero que faya es el sitio.
Mientras que la ubicación sea tan mala como lo es Séneca poco se va a conseguir. Por lo demás es un buen presupuesto y podría dar para hacer mucho, en cuanto a lo del porcentaje de autores locales y regionales… Bueno, es una forma de tener calladas a algunas asociaciones y personajes, pero con darles horarios de entre semana el objetivo de la visibilización de estos se va al traste.