- Crónica del Jámtrico de Mayo
- Lugar: La Casita (Alicante)
- Organiza: Asociación de Cantautores y cantautoras de Alicante. La Explanada.
- Fecha: 5 de mayo
- Autora: Inés Saavedra
Es cinco del cinco pero no quinta jam que fue la cuarta en la casita. Casita, que cada vez es más hogar.
Esta crónica no será la narración descriptiva de que lo que allí pasó, porque esta jam fue diferente. Siempre son distintas pero en esta ocasión, no hubo dinamizador y si una maestra de ceremonias que no inauguró porque por primera vez, la estrenó un cantautor ajeno a la Asociación: Miguel (Miguelito) Bueno, que no queriendo perder su silla, tenía el tiempo justo para volver a Sevilla.
Continuó con Inés Saavedra al timón; y la tripulación formada por los Copé’s bros, Manolo y Alfonso, Anita Antón, Yaike, Rapahuá (Rafa de Juan), Yoni Ramirez, Ramizgorta o Ramirezchea (no tenemos muy claro con cual quedarnos), Oli, Vladimir, el Niño Baho, Eli y Mati. No participaron en este orden y en la palestra a veces eran uno, dos o tres ¿quiénes? ¿qué cantaron? Vuelve a leer las líneas de arriba… ¿ya?
No te voy a contar quienes y que cantaron, te voy a contar lo que se vivió, así que si no entiendes estas letras, tendrás que venir a la próxima jam.
Se abre la puerta. El calor del sur refresca y el frío del norte calienta. El tiempo se cuenta de diez en diez años, en ruedas pinchadas y medias canciones. Los viajes son de ida y vuelta o solo de ida, te espero a la vuelta. La distancia se recalcula, se recuenta, porque todo está lejos y todo está cerca. La sangre se une, se tocan las voces y los ojos, se cierran. Te mima una nana, te mece un poema y te agita una jota muy africana.
.- ¡Eh, vosotros, guitarra, violín, katsá! ¿Habéis escuchado a los dientes silbar?
Las palabras recién paridas o las escritas ya, apenas cantadas, veloces nos cuentan que no es mentira que en el templo de nuestro cuerpo, hay un mar.
Y del mar llegan viandas que las niñas risueñas toman y una canción que se cree triste pero no lo es porque en el camino encontró un arrullo de Ucrania.
Hoy nada es triste. ¡qué va! Qué salga la flamenca a bailar un swing improvisado de violín.
Lo mío es vuestro y lo tuyo, nuestro. Nada es del yo. Repetimos, repetimos, repetimos, una y otra vez, hasta que así aprendamos que, cada mes, en esta tierra sagrada, volvemos a nacer.
.- ¿Cómo dices que se toca? …
.- El miércoles saldrá…
.- De momento, es refugiado…
.- Allí en el campo están…
.- Suerte y verás que en dos días estás corriendo…
Besos, abrazos, risas, besos, abrazos, risas, besos, abrazos, risas.
Todo está lejos, todo está cerca. Es otoño y primavera. Es fusión sin confusión. Calma. Se cierra la puerta.
Pues sí, así fue. ¿Cómo? ¿qué no te has enterado? Pues eso es lo que pasa. Da igual lo que te cuente porque si no vienes, no lo sientes. Ven a la próxima ¡no te la puedes perder!
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